Hay muchas historias que se cuentan por ahí, algunas ciertas, algunas no tanto, pero es momento de compartir con ustedes parte de lo sucedido, porque a pesar de la distancia, la red o los continentes, hemos reído y hemos jugado, hemos ganado y hemos derrotado. Todo comenzó por una historia mucho antes de Tentlan, ya que un día fuimos jugadores que nos tornamos en guerreros, el tiempo y la amistad nos hizo unirnos; bien dicen que un amigo no es el que dice serlo, es aquel que está ahí para demostrarlo, un evento en particular nos llevaría a buscar nuevos horizontes, nuevas aventuras y es así que Dracul, Guerrero Jaguar y quien les escribe fundamos Arcanos.
Al inicio de los tiempos era sorprendente ver un tablero con no más de diez jugadores en la tabla de posiciones, un terreno diferente, misiones por completar, cada uno de los fundadores con habilidades diferentes, así comenzó todo, sería Dracul quien tras un par de bromas en el chat del reino anunciaría el primer ataque al primer lugar de ese momento un jugador que en el silencio vio como sus tropas eran vencidas.
Así darían inicio las dos primeras grandes tribus del reino Mictlan y Arcanos, como olvidar el empezar a leer poco a poco a nuevos jugadores, las disputas por invitarlos a unirse a alguna de las dos tribus, el buen Gortiax y Dracul haciendo lo propio anunciando lo que cada uno podría ofrecer a los recién llegados.Sería de ese modo como ambas tribus se conformarían, al interior veríamos la llegada de grandes personajes como el travieso Uruk, una irreverente Celeste, el callado Rorschach, un caritativo Devlious, un piojito llamado Fallen, entre varios más como en todas partes era de esperarse que los malos entendidos o discrepancias llegarían y algunos jugadores continuaron su camino por separado – en algunos casos guardando un profundo rencor hacia los Arcanos – sería ese el momento en el que se llegó a la difícil decisión de cerrar por primera vez las puertas de Arcanos, algo que siempre conversamos era referente a la poca importancia que tenía para nosotros el poder, siempre valoraríamos por sobre todas las cosas la amistad que surgía, ya que más que simples gamers tenemos hermanos.
Con el entendimiento e investigaciones del juego se integró el primer consejo Arcano, donde surgirían los primeros Generales y Capitanes de Guerra, un consejo que se colocó frente a dos retos importantes, el primer Desafío Arcano, en donde se buscaba que los integrantes de la tribu aprendieran sobre el juego y desarrollaran sus ciudades, un desafío que se vería eclipsado por una batalla con Kronoss17, jugador que tomo por blanco a los jugadores nuevos, tras un par de días, sería Devlious quien llegado el momento realizaría el primer ataque del consejo Arcano, dando fin a Kronoss17, una victoria que más allá de las tropas eliminadas, sería una victoria para todos los Arcanos que confiaron, que creyeron y que apoyaron, demostrándonos que la elección del primer consejo era correcta; más tarde el propio Kronoss17 reconocería su derrota, Evissam se coronaría como el primer triunfador del Desafío, dos logros importantes para nosotros y Evissam recibiría los recursos, tropas y turquesas prometidas al vencedor del desafío.
Sabíamos que estábamos en un buen camino Arcanos tenía unión, reglas y amistad surgiendo, lo que yo no sabía era el rol que como Micantlecutli tendría que desempeñar, ya que esto era apenas el inicio de las historias que Arcanos escribiría en el reino, llegarían nuevos Arcanos, se romperían alianzas, iniciarían torneos y todo esto ahora se los cuento desde el silencio, en una tribu que no es Arcanos ya que el momento de revelar su existencia se está acercando.
"Cuando en una batalla te encuentres solo y perdido, y tus enemigos te hagan dudar de tu supervivencia. Mira al cielo, entre todas las estrellas y el vació ... ahí nos verás, cayendo como rayos contra el suelo, y en el momento en que se abran nuestras capsulas. Entonces divisarás a los aliados que te harán cambiar el rumbo de la batalla, nosotros somos ¡¡¡¡¡ARCANOS!!"
